viernes, 24 de diciembre de 2010

La ley Sinde (I)

La polémica ley Sinde está de moda últimamente, no ha sido aprobada en el congreso de los diputados español, pero volverá la ministra de cultura española a intentarlo.
Cuando yo me pongo a examinarla lo tengo claro, mi opinión es completamente objetiva y no me ciega absolutamente nada la posibilidad de que a los internautas nos vayan a perjudicar.
Cuando me pongo a pensar sobre el tema, en primer lugar me vienen a la memoria las grandes editoriales y grandes discográficas, que por supuesto no me dan pena ninguna, algunas multinacionales se han incluso fusionado al puro estilo bancario actual.
Universal music tiene multitud de filiales compradas, Sony y BMG hicieron una “fusión” que realmente fue una absorción, EMI a su vez en su día también compró otras discográficas como la Virgin, y luego Warner que por ejemplo en España se hizo en su día con el sello DRO.
Después en el mundo de la música están las discográficas independientes, que en Inglaterra y Estados Unidos por ejemplo han tomado tanto protagonismo como las grandes multinacionales, vemos discos de discográficas “indies” en esos países en lo más alto y muchas han salido adelante y se han hecho muy importantes en el mundo de la música, ejemplos como Domino (sello londinense) (arctic monkeys, Franz ferdinand, animal collective…) o matador (sello americano)(pavement, sonic youth, yo la tengo, interpol…), estos son dos ejemplos de sellos indies que poco a poco se han hecho poderosos.
Las indies empezaron a principio de los noventa , entre las cuales destacaba Sub Pop, el sello indie americano que cobijaba a grupos como Nirvana, mudhoney, y más tarde gente como the postal service (un grupo formado por dos integrantes que se llaman así porque vivían al otro lado de Estados Unidos y se envían lo que componían por el servicio postal de correos), low, foals…
¿Qué sucedió cuando Sub Pop se iba haciendo grande? Pues que llegó una multinacional asustada, Warner, y ofreció muchos millones por hacerse con el 49 % de la compañía independiente, pago una cantidad exagerada y en el fondo el único pelotazo de Sub Pop fue Nirvana, los demás han tenido en cierta medida éxito pero no para el gasto que tuvo la Warner por solo comprar una parte del sello de Seatle.
Las multinacionales tienen miedo de que les quiten el negocio, que otros se metan en su negocio es un oligopolio, sin embargo las indies se lanzaron a intentar luchar, muchas lo han conseguido y otras han caído en el intento.
Y alguien se preguntará esta historia que tendrá que ver con la ley Sinde, pues realmente mucho, en este país, cuando una multinacional va a la famosa Sgae a firmar el contrato lo tratan de diferente forma que a una indie, las multinacionales en España le pagan a la sgae por copia vendida, sin embargo las indies si sacan al mercado mil discos tienen que pagar por los mil discos los vendan o no, parten con desventaja, evidentemente como habitualmente el pequeño comercio en España vejado y maltratado, favoreciendo a las grandes superficies, y también ha sucedido con las tiendas de discos pequeñas que a veces tenían que ir al Carrefour por ejemplo a comprarse discos porque eran más baratos que lo que le ofrecían a esa pequeña tienda las distribuidoras de música, una vergüenza, siempre perjudicando al pequeño.

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